El Port de la Selva

Dónde pernoctar

El Port de la Selva es un pequeño pueblo situado en el Cap de Creus (cerca de la frontera con Francia) donde a finales de Septiembre puede ser una buena época para hacer una escapada con la furgo ya que a partir de la segunda quincena se vacía el turismo (incluso la zona azul deja de pagarse). Todavía queda algún bar abierto y se está muy tranquilo. Nosotros dormimos en el mismo puerto en primera línea de mar, en un sitio de zona azul que era bastante grande y cabía la furgo perfectamente.

Si lo que tenéis es una autocaravana, no podréis entrar directamente al pueblo pero sí que podréis estacionar justo a la entrada que hay un área de autocaravanas (en frente de la gasolinera Cepsa) y está a unos 10 minutos del centro.

La ruta

La ruta que hicimos fue bastante larga, circular de unos 17 kms en total y de todo el día. Por suerte estaba nublado y pudimos hacerla bien, aunque nos quedamos un poco cortos de agua. La ruta sigue un tramo del Camí de Ronda (famoso por ser el camino que bordea la Costa Brava) por lo queen la ida iremos encontrándonos playas más grandes y calitas solitarias y la vuelta la haremos por el interior. Es muy importante que llevéis calzado cómodo ya que el camino de ida es por las montañas escarpadas de pizarra y resbala un poco.

Nosotros comenzamos la ruta desde el centro del pueblo ya que era donde habíamos dormido la noche anterior y hacíamos la ruta con más gente, pero podéis aparcar en Cala Tamariua directamente y os ahorráis un kilometrillo 🙂 Justo en este punto, nosotros hicimos una sesión de yoga colectiva para activar el cuerpo antes de la caminata.

Nuestra idea era hacer la ruta hasta Cala Tavallera pero como éramos un grupo grande ya tuvimos suficiente, así que fuimos hasta Cala Galera y volvimos por el interior.

Cogimos el sendero con dirección Cala Fornells: atravesamos de punta a punta la Cala Tamariua siguiendo la orilla y seguimos buscando la costa (se ve claramente por dónde va el sendero) hasta llegar a Cala Cativa y siguiendo el sendero llegamos a la Cala Fornells.

A partir de este punto el tramo se complica un poco. El sendero desaparece y a nosotros también se nos acabó la cobertura, por lo que tuvimos que improvisar. Aprovechamos la improvisación para descansar 10 minutos en la cala. Justo al final de la calita, subimos como pudimos por las rocas y seguimos rodeando la costa.

Pasamos una calita más (Cala Torta) y ya encontramos el sendero de subida al Puig Gròs. Es una subida bastante pronunciada, por lo que llegaréis arriba casi sin aliento. Mejor aprovechad para hacer una paradita arriba para comer algo, tomar el aire y celebrar que hemos llegado a la mitad de la ruta. A partir de este punto, el sendero se convierte en una pista de tierra hasta el final de la ruta.

Si estáis muy cansados podéis seguir la pista hacia el interior sin desviaros, pero si queréis llegar a la Cala Galera como hicimos nosotros, éstas son las indicaciones: siguiendo la pista de tierra, hay un momento que hay un árbol grande (fácil de ver porque en esa zona prácticamente son todos arbustos de media altura) y encontramos una bifurcación a la izquierda de bajada hacia la costa. Es una bajada bastante pronunciada que luego tendremos que volver a subir. Este sendero es muy claro y llega directo a la Cala Galera. En esta cala encontramos un chorrito de agua (no nos arriesgamos a beber nosotros pero los perritos lo aprovecharon bien) y nos relajamos un buen rato ya que había salido el solecito y se estaba muy tranquilo. Volvimos a subir el sendero hasta la bifurcación del árbol grande y seguimos por la pista unos cuantos kilómetros hasta llegar al Port de la Selva, pero esta vez llegamos por la parte de arriba donde están las urbanizaciones, todo cuesta abajo hasta el puerto.

Os dejamos la ruta que registramos en Strava por si puede serviros de guia en vuestra caminata.

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